Cada vez más a menudo colisiono con individuos que por una extraña razón derrochan la mayor parte de su estepario tiempo rumiando en como asediar y derribar a los demás.
Si te paras a pensar un segundo seguro que hoy te has topado con alguno de ellos, les has visto, oído o sufrido. Esta tropa fastidiosa anda suelta a la caza y captura con un claro objetivo, JODER.
Pero juntos podemos ganarle la batalla a ese CRITICÓN que posee el manual de la verdad absoluta, el resto estamos equivocados y actúa malévolamente para hacerse valer.
¡Huye, el PROBLEMÁTICO!, ése que crea polémica por todo, no escucha y cree que alzando la voz su razón será aún más verdadera.
¡Ños, el EGOCÉNTRICO!, le encanta que le dores la píldora continuamente y solo sabe hablar de sí mismo.
¡Horror, el PARANOICO! , viene de fábrica con un manual de sucesos, te amarga la vida y es como un aspersor salpicando miedos y recelos. Nunca le digas que te vas de viaje porque te desgranará una a una todas las desgracias posibles.
¡Uf, el CHULO! ,te escupe en la cara lo bueno que es en todo y lo que él tiene es lo más, no te dejes arrastrar porque entrarás en una competición superflua que te llevará a la insatisfacción, la misma que él sufre, ¡agotador!.
¡Tiembla, el ENVIDIOSO! , no reconoce un mérito ajeno sin ponerle algún “pero” ni aunque le maten.
¡Horror, el MONOLOGISTA! , te pregunta cómo estás y sin darte tregua comienza a relatarte su insulsa vida como una ametralladora humana.
¡Puf! , el que se cree el ombligo del humor y resulta aburrido, pesado y patético. Ya decía mi abuela que más vale caer en gracia que ser gracioso.
¡Que rebota, el PELOTA! parece amable y simpático pero manipula hasta su sombra con tal de obtener algún beneficio personal. Ni te cuento de los agresivos y autoritarios que solo disfrutan insultando y atemorizando y ¡qué me dices del arrogante!, que pretende hacerte sentir como un ser estúpido e inferior.
¡Aggghhhhh! Sacúdete tanta energía negativa, no pierdas tiempo con esta gente que no aporta nada y con paso garboso dirígete hacia esos tantos otros que te alegran y demuestran en cada gesto que pertenecen al grupo de las buenas personas, pero…
¡OJO! Cuídalas, escasean.
Glosagon.