Después del séptimo salto había llegado su momentazo… caída libre a 250Km/h.
Sus nervios tejieron una red interior que no le amortiguaron.
Su paracaídas no se abría.
El mundo giraba bajo sus pies sin contar con ella.
Solo los gritos desquiciados de su monitor la mantenían atada al cordón umbilical de la realidad.
La visión cercana del suelo le hizo postigar los ojos.
No sentía la cara pero logro escupir varios dientes
La suerte, por esta vez, no la escupió de la vida.
Glosagón
Muy impactante el texto, me has tenido pegada a la silla para saber qué pasaría al final. Biquiños!
ResponderEliminarPues vaya pánico del que sufrió, un saludo
ResponderEliminarTremendo relato! Por suerte tuvo un final amoratado pero feliz. Un abrazo
ResponderEliminarPor favor vaya saltito.
ResponderEliminarabrazo
Ayyyy Gloria!!! Me quedé con una sensación de espanto!!! Lograste tenerme en vilo, mujer!
ResponderEliminarMuy bueno!!!
Besos porteños! :)
Hola Gloria!!
ResponderEliminarPero que blog más majete tienes. La foto de cabecera me ha cautivado y tu mini relató me ha dado vértigo!!
Jejejej
Un beso!
El sólo imaginarme en esa situación, sentí que el estómago me daba vueltas. Excelente relato.
ResponderEliminarSaludos.
Que susto! de verdad que de pensarlo se te pone la piel de gallina.
ResponderEliminarGracias por pasar por mi blog, me quedo por aca.
Saludos
Hola, te devuelvo la visita, si es que las bloger´s somo muy educadas.
ResponderEliminarUn relato para mantener el aliento dentro, si es mas largo me ahogo.
Saltos y brincos
Tension lograda. Quede con vertigo dolor de dientes
ResponderEliminarBesote
¡Nada, que al final se deja los dientes...!
ResponderEliminarUn abrazo Gloria.
Gloria:
ResponderEliminarQue a mí no me hacen saltar ni con la orden de un Juez.
Y mucho menos ahora, después de haber leído tu cuento, tan convincente.
Un gran abrazo.
Con esta pieza, Gloria, me has llevado a pensar en la desazón que se ha de sentir cuando se está cayendo y me vale para cualquier salto al vacío que pueda llegar a darse en la vida.
ResponderEliminarUn texto que cuento mucho entre líneas.
Abrazos,
Gloria Vengo a tu invitación ha sido una satisfacción conocer este admirable blog
ResponderEliminarSaludos desde Abstracción texto y Reflexión
Ufffff Gloria, ésta vez me has hecho leerte conteniendo la respiración.
ResponderEliminarMenudo vértigo..
Besitos
Lo que debería hacer a mí entender, es no confiar en la suerte la próxima vez y utilizar redes de seguridad y confianza, si fuera posible.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un mensaje de esperanza para esos momentos en los que ves con terror que no se te abre el paracaídas.
ResponderEliminarUn abrazo
Saltamos al vacío constantemente sin red y sin paracaídas, y escupimos dientes... amarguras... decepciones y a pesar de ello seguimos viviendo.
ResponderEliminarMagnifico retrato vital.
Un abrazo,
Vaya salto! ...La vida está llena de ellos ¿Cuántas veces no nos dejamos los dientes en haceres que ni siquiera valía la pena del riesgo?
ResponderEliminarBesos y feliz semana
Buen relato, me da vértigo con sólo leerlo...
ResponderEliminarUn cariñoso abrazo...
Ay Gloria!! mi mente me llevó por otro camino y he sentido un sudor frío leyendo tu entrada.
ResponderEliminarTe mando un beso de gofio, al que le añado azúcar.
Buena semana!!!!
Me ha tenido en tensión eso que es corto. Daba por hecho que se quedaba estampada en el suelo.
ResponderEliminarBesos^^
Gloria, siempre tenemos que aventarnos a lo no seguro para conocer así perdamos algunos dientes.
ResponderEliminarAbrazos.
Ayyy, y yo que tengo muchas ganas de saltar en paracaídas, creo que me lo voy a pensar ahora, jaja!!
ResponderEliminarBesitos
Respondo a tu visita y la agradezco lo mismo que la invitación. Desde ya el título de tu blog me gusta, "Gofioconmiel" sienta de perlas para el rumiar poético. Tu amiga la paracaidista salvó la vida milagrosamente. ¡Qué temazo para el poema! Lo aprovechaste muy bien te felicito. Un abrazo de un poeta a otro y desde Argentina, San Antonio de Padua, Provincia de Buenos Aires. Tu coterráneo Pedro de Mendoza la fundó por primera vez, allá por 1534 bajo el nombre de "Santa María del Buen Ayre"
ResponderEliminarMe has quitado las ganas que tenía (ninguna) de saltar en paracaídas ;)... estos sustos de madrgada hay q avisarlos jeje. Un besito
ResponderEliminarPor cierto, te dejo enlazado mi otro blog, por si te apetece pasar ;) El Frenopatico
ResponderEliminarSi es que pa que tentar a la suerte... Con lo bien que se está con los pies pegados a la tierra! Yo solo me duermos en alguna nube cuando vuelo con mi imaginación pero de ahí no paso!! Que valoro mucho mis dientes!!!
ResponderEliminarPerdona, no he podido pasar antes. Llevo un catarro del quince encima. Ahora ya me quedo por aquí.
Besotes!!
La vida está lleno de ellos y a veces sin para caídas...
ResponderEliminarMe encantó tu relato, Gloria.
Mis fraternos saludos
ésta es una frase q paso a compartirla.
ResponderEliminarNos prometieron que los sueños
Podrían volverse realidad.
Pero se les olvidó mencionar que las pesadillas también son sueños.
“Oscar Wilde”
Buen finde
Un gran micro
ResponderEliminaratrapa y crea un ambiente
que rodea con intensidad
lo que va a suceder.
enhorabuena!
Un beso.
Como decia James Bond:"En el Riesgo está el Placer"
ResponderEliminarHizo Realidad un Sueño y, en esta ocasión, los efectos colaterales fueron livianos.
Seguro que en otra ocasión, calculará mejor los inconvenientes...El Ley de Vida.
Abrazos...Ya soy tu Seguidor.
Leo tu relato como una metáfora. Algunas veces la vida no te proporciona ni la apertura de ese paracaídas de emergencia y aún así seguimos adelante.
ResponderEliminarSuerte y gracias por tu visita.
Hola, Gloria, muchas gracias por tu visita, has sido muy amable.
ResponderEliminarAquí me tienes, en tu casa, y ha sido un placer leer esta entrada. A pesar del vértigo que me producen las alturas, lo tomo como un ejemplo de que no siempre las aventuras terminan del todo bien, pero qué maravilla es lanzarte del avión, ¿verdad?
Un abrazo.
Es como en la vida, tiene mucho de saltar y aventurar dependiendo un poco del azar. gusto en conocerte Gloria, mantendremos el contacto. Saludo afectuoso, me alegro que te haya gustado mi blog. Vives en un hermoso país.
ResponderEliminarLa vida está plagada de saltos al vacío y sin paracaídas,Gloria.Un fiel reflejo de la realidad es tu micro.
ResponderEliminarFelicitaciones :-).
Besos.
Hola, bueno a mi me hubiera encantado tirarme de un paracaidas, pero ahora ya lo dejo para otra vida....
ResponderEliminarEspero que a ti no te falle nunca el paracaidas, y tus saltos sean siempre con triunfos.
Paso a visitarte y desearte unas Felices Fiestas, Sois muchos blogs y no puedo visitaros a todos.
Un abrazo.
No puede ser... la suerte o el destino? Qué lío me hice...
ResponderEliminarBesos mentales.