Contemplé aquella mesa de madera maqueada donde
reposaban 5
cuchillos de diversos tamaños y
formas...
...me pregunté cual sería para mí.
Me senté en una de las
4 sillas que acechaban en el rincón y...
...esperé la respuesta.
Sumé el número de sillas y de cuchillos...sonreí.
Mi
número de la suerte era el 9.
ah,me encanta este texto pequeño,como una adivinanza que queda repicando en la tarde!
ResponderEliminarMuy bueno, tuviste suerte de tener ese numero como el de la suerte, me ha parecido genial. Un abrazo
ResponderEliminar!Ah!... El nueve tu numero de la suerte.
ResponderEliminarSaludos...
Y el puesto?
ResponderEliminarBuena suerte y hasta luego!!! Besos
ResponderEliminarésto es muy particular y lindo Gloria!
ResponderEliminarMuy ingenioso,abrazos
ResponderEliminarUno, hermosa foto de cabecera. Te deja impactado.
ResponderEliminarDos, la entrada. Hasta de la amenaza es usted capaz de sacar optimismo, eso es casi un superpoder.
Saludos
iba a escribirte que yo también anduve escribiendo sobre cuchillos pero no pude dejar de advertir que en la foto sólo hay cuatro facones y un rebenque. De todos modos me gustó el texto.
ResponderEliminarEsos cuchillos no estaban destinados para el/la protagonista de tu micro-relato.
ResponderEliminarSangrante, desde la lectura que yo hice detu trabajo.
Abrazos, Gloria
Fina
Que la suerte te acompañe.
ResponderEliminar¡Madre mía! 5 cuchillos, y 4 sillas suman 9, seguro que se salva de lo que se tenga que salvar.
ResponderEliminarInquietante relato el que nos traes.
Besos
A veces hay que darle la vuelta a todo para encontrar la respuesta.
ResponderEliminarUn besito
Cuchillos y sillas tienen un aspecto tétrico,no hay duda.
ResponderEliminarPero con el 9 como número de la suerte no van a poder, seguro.
Buen corto Gloria.
Saludos.
el nombre de tu blog me hizo recordar de mi infancia... como comía gofio en Cuba jajajaja
ResponderEliminary este post, entre cuchillos y sillas, san un corto de maravilla
saludos
carlos
A mi me gustan más los números de en medio, los que pasan desapercibidos, el 4, el 5, nadie se fija en ellos, los extremos son más peligrosos... y el 8 tiene la vida amarrada por el medio.
ResponderEliminarBesos desde la tierra del viento y las olas...
Es mas relato que poesia, pero es un lindo texto que me gusto bastante
ResponderEliminarjca
Nada mejor que un toque de ansiedad para amenizar la espera.
ResponderEliminarSaludos
J.
No sabia que ponerme y me puse feliz. Me ha gustao.
ResponderEliminarBeso
Gloria. Entonces tu número de la suerte salvó al personaje. ¿Lo salvó porque quería salvarse?
ResponderEliminarAbrazos.
me gusta el nombre de tu blog
ResponderEliminargofio con miel
y me gusta como escribis
Excelente e imaginativo..
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
No está mal tu número. El mío es el 23.587.641,180.699.374.052.873.438.162.575.697 (Bueno, también lleva un decimal, pero ese no lo recuerdo)
ResponderEliminarAbrazos, siempre
Bien parido.
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